LA VOZ DE LOS CORAZONES ROTOS… (el dardo en el corazón)
¿Cuantas personas conoces o, quizás incluso tu mismo, que se pueden encontrar en la situación que a continuación relato?
¿Culpa, quizás por haberse enamorado de alguien que no le corresponde? Pero, ¿es que acaso el amor puede decidir conscientemente lo que le conviene?
¡Claro que no!
Si fuera así se evitaría la humillación que representa el despreció o, escuchar que te digan:
¡Ya no te quiero!
Cierto que muchas personas podrán reírse de esta situación y, tener muy claro que si a ellos les ocurriera algo parecido olvidarían con rapidez, por aquello: que el mar está lleno de peces.
Sin embargo, hay otros, quizás una mayoría que cuando se encuentran en una posición como la descrita, caen en la más grande de las tristezas, arrastrando la pena aunque exteriormente puedan sonreír.
¡Pero la vida es así!
Y, el amor igual que no puede seleccionar, tampoco se puede acepar por lastima. Pues si esto ocurriera así no sería amor, sería conveniencia o, cualquier palabra que al que se le pregunte pueda responder.
Por esa razón he decidido participar y, darle voz al corazón de las personas que en la actualidad puedan sentir eso que he expreso en esta misiva, de alguien que nunca la escribiría, ya que si lo hiciera hablaría desde lo más recóndito de su alma. Y ello representaría desnudar totalmente su espíritu.
CARTA QUE NUNCA ESCRIBIRÉ:
Podría decirte que ya no te quiero, que no me importas nada y, que no quiero saber más de ti.
Pero lo cierto es que nunca te he dejado amar y, aunque probablemente lo ignores aún te sigo amando.
El silencio no quiere decir olvido, sino más bien tristeza y, respeto por la decisión que tomaste.
Y pese que no estés físicamente junto a mí, si lo estás espiritualmente.
Lo sé porque te siento y, te presiento siempre a mi lado, del mismo modo que en aquellos momentos de mayor felicidad.
¿Quien en estas circunstancias no podría soñar contigo? Acaso un loco o, quizás un monstruo desalmado.
Pero lo cierto es que yo no soy nada de eso y, aunque por las razones expuestas permanezca en silencio, te amo y, te amare siempre por más tiempo que pase, hasta que llegue a exhalar el último soplo de mi vida.
AB